Te miro sobre tu almohada de nubes
y aún dormido, desconectado del mundo
atrapas mi mirada y mi sentir
No puedo dejar de contemplarte,
duermes rendido y aun así
me magnetizas el ser y me atraes
hasta el lecho donde duermes.
Mientras dormías y te velaba
surgían una avalancha
de pensamientos felices,
recuerdos presentes,
como cuando me atraviesas
con tu mirada y dulcemente me matas.
De cómo pones tu dedo
en tu boca mientras fumas
y yo deseo ser el humo
que escapa de tus adentros,
el que acaricia tus labios
y fundirme con tu aliento.
Mis ojos se llenan de almíbar
emocionadas lágrimas
y siento que te amo.
Mientras duermes, te acaricio
fluye una ternura incontenible
solo comparable al deseo
que me provocas despierto
cuando me miras como tú sabes
con tus ojos verdes de bosque
perdidos en un blanco de nieve.
Duerme tranquilo mi vida
yo te custodio.
Te guardo en esta tarde de sol
mientras beso tus ojos cerrados
Y te abrazo como en las noches
cuando busco refugio en tu regazo
Puedes estar seguro que en este mundo
nadie puede amarte tanto.
Que suerte tan dulce tiene tu ser amado.
ResponderEliminarCuando me vuelvan a preguntar si existe el AMOR, les diré que lean este poema.
ResponderEliminarComo bien dice Hímero, qué gran suerte tu ser amado!!
Feliz 2010, besos infinitos
Un Gran Amor, como el de las pelis que cuenta la yaya... Un Gran Amor con grandes preocupaciones que te desvelan pero también con una Gran Pasión que te alimenta, te mata de amor cada noche y te resucita de ilusión cada nuevo día. Sólo los valientes obtienen las mieles de lo mejor, aunque les vaya la vida en ello. Y tu eres valiente, disfruta de tus mieles y siéntete siempre acompañada en tus preocupaciones.
ResponderEliminarUn beso
Hímero yo soy muy afortunada y el muy amado.
ResponderEliminarNocheinfinita el amor existe, doy fe
Elenita que te voy a contar que tu no sepas.
Gracias por estar ahí.
Un beso a los tres, feliz entrada de año y gracias por vuestros comentarios.