Las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada

lunes, 26 de noviembre de 2012

En ese día de enero



En ese día de enero
te acaricio y en la caricia te amo.
Es mi cuerpo el que roza tu piel,
son mis dedos los que recorren tu cuerpo
Primero, suavemente tus ojos, luego tu cuello,
para luego besar tu nuca.
y es mi tacto el que se desliza suavemente por tus hombros,
mía la desnudez la que se aproxima lentamente a ti,
acariciando tu espalda liberada de ropajes,
siento tu deseo en la semioscuridad,
sin verme sabes que estoy ahí.
Coges mis dedos entre los tuyos
los míos trazan delicados círculos en tu piel, 
en cada roce, cada centímetro de tus pechos.
Siento como oprimes tu espalda 
contra mi desnudez erguida.
Con esas mis caricias,
una llama se consume encendida en tus ojos,
deseas que la contemple y te giras hacía mi.
Desnuda y adherida a tu desnudez,
esta mi piel.
Están mis hombros abiertos bajo tus hombros.
Y tú, flotante en mi desnudez.
Te entregas al beso que nos une
Alzaré los brazos y sostendré tu aire.
Afluentes de tus ríos serán mis ríos.
Navegaremos juntos, y yo seré tu vela,
Un viento que te llevara por mares escondidos

U.M.

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