Las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada

lunes, 21 de junio de 2010

Mi sobrina y yo en los tiempos cuando reinaba Carolo

Lo primero que iba a escribir hoy aquí cuando llegara a mi casa de noche era sobre algo que mi sobrina comentó ayer en la tarde.
Ella que es muy emprendedora y muy capaz de gestionar y llevar buenas causas adelante me comentó un proyecto a desarrollar dentro del ámbito de mi ciudad y la verdad es que estoy muy ilusionada con el tema.
Espero poder colaborar en ello, porque ahora que mis proyectos de futuro, de cambio de ubicación y de clima, se han quedado parados por un tiempo, solo hasta que amaine la tormenta y estoy segura de que amainará, lo se, voy a tener tiempo y ganas para colaborar en una buena causa.
Se acaban las clases y no se que voy a hacer con tanto tiempo libre en las mañanas ahora que me acostumbré a no estar en mi casa durante todo el día.
Por cierto, hablando de casas. Una vez escribí un blog que hablaba sobre el orden de una casa y alguien lo leyó pero no lo comprendió y por lo que he visto se dio por aludido y se lo tomó muy mal jajaja. Lo siento pero cuando te leí me partía de la risa de lo tontaka que llegas a ser a veces.
Todo eso que dijiste y que seguro iba dirigido a mi, es una gran verdad, a mi me ocurre, y tu lo sabes muy bien, pero lo que yo quería decirte es que miraras en tu interior, no que quitaras el polvo jaja, nunca me metería en algo así, en mi casa hay muchas cosas por hacer pero pocas ganas, menos en estos meses que ni la piso mas que para dormir, se me caía encima de tanta soledad.
Decía que ordenaras tus ideas y tus sentimientos, nunca pretendió ser una crítica a tu casa, aunque la mano de una mujer te vendría muy bien.
Me gusta saber que me lees aunque te enojes, es muy importante para mi, a pesar de que ya no tenemos nada en común mas que un recuerdo. Recuerdos nuestros a los que no pienso renunciar, porque son parte importante en mi vida.
Buenos días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario